Absolutamente, no soy una Eveneningprime rose

A veces, el nacimiento, a pesar de que haya tenido la apariencia de normal, puede resultar demoledor para un bebé por haber nacido niño cuando los padres han deseado con todas sus fuerzas una niña o por no haber sido concebido de forma deseada. Inadecuación.

Esta impronta, tanto de la madre como del padre, queda arraigada en la esencia del niño para desarrollarse de mayor como defensa de una futura circunstancia: el miedo al vínculo.

Estos son niños que a medida que crecen, de forma inconsciente, entienden que el vínculo de sus padres ha sido la causa de su dolor. Ellos perciben que son seres no deseados. A partir de ahora su defensa ante esta situación será el miedo al compromiso. El miedo a  la pareja. 

Imatge feta per Mi Kee

Este tipo de personas se pasan toda la vida estableciendo relaciones que les llevaran a no tener pareja nunca. 
Ellos, a menudo, o se lamentan de no tener pareja o tienen relaciones donde el NO les viene dado de forma natural por una simple atracción por alguien con el que saben que la pareja no prosperará nunca: amores en secreto hacia parejas imposibles, amores que alimentan e idealizan desconectándolos de la realidad, o bien amores hacia personas destructivas que comportan relaciones abusivas y que desencadenan en nada. Pero también pueden establecer relaciones que, ciertamente, son lo que buscan. Por fin encuentran aquella persona que les hace vibrar, con la que conectan, con la que resuenan conjuntamente, pero sin saber porque hay algo que les frena y que les tira para atrás.

Pero, ¿qué pasa cuándo esta manera de ser no viene de uno mismo si no que alguien conoce a una persona con este patrón emocional??? Exactamente lo mismo. Conocer a alguien así e intentar relacionarse sentimentalmente denota el mismo miedo al compromiso, porque con estas personas NUNCA se podrá tener ningún vínculo afectivo. Estamos delante de la misma energía: el NO que dan y el NO que reciben. Son los EVENINGPRIME ROSE.

Las EVENINGPRIME ROSE son prímulas al atardecer, amarillas, delicadas y entran en colapso cuando anochece para entregarse luego al sol. Es una planta lunar que trabaja las aguas del cuerpo, las emociones más primarias. Es de la familia de las onagras conectando así con patrones de desequilibrio que conllevan  problemas de fertilidad, con los órganos sexuales, de impotencia.

Es una esencia poderosa que aporta capacidad al compromiso y a abrirse emocionalmente.